Bodegas Portia se integran en su entorno gracias a su fachada de acero autopatinable

Descripción

La nueva bodega del grupo Faustino, un complejo de 12.500 m2 situado en la zona de Ribera del Duero, tiene una capacidad de producción de 1 millón de botellas al año. El diseño en estrella de 3 puntas se basa en las 3 fases principales de la producción del vino: la fermentación en cubas de acero inoxidable, el envejecimiento en barricas de roble y finalmente la crianza en botellas. Estas etapas definen los tres distintos volúmenes de la construcción, controladas por un centro de operaciones en el corazón del edificio.

El terreno en el que se ubica la bodega se convierte en un elemento estratégico de este proyecto, ya que el edificio está situado en una loma de forma que las alas donde están las barricas y botellas están parcialmente bajo tierra, creando las condiciones ambientales más favorables para el envejecimiento del vino, mientras que el ala donde tiene lugar la fermentación está descubierta para de esta forma facilitar la liberación del dióxido de carbono.

Además, el diseño facilita la circulación entre las tres alas, usando la gravedad para ayudar al movimiento del vino dentro del edificio, consiguiendo así la máxima eficacia y el menor riesgo de daño para las uvas y el vino en sus diferentes fases de elaboración.

Fachada de acero autopatinable: envejeciendo con el tiempo

Mientras que la estructura del edificio es de hormigón utilizando la masa termal para controlar las temperaturas en el interior, la fachada de las principales elevaciones está recubierta con escamas de acero autopatinable (Indaten® by ArcelorMittal) que, con sus tonos rojizos y marrones, se hace eco de los tonos del paisaje circundante. Este tipo de acero, también conocido como Corten, forma una pátina que le protege de la corrosión por lo que no es necesario ningún tipo de mantenimiento.

Mínimo impacto visual y máximas ventajas medioambientales

Su ubicación en la zona de Ribera del Duero, a unos 150 km al norte de Madrid, cuenta con inviernos muy fríos y veranos muy calurosos con escasas precipitaciones. Los marcados aleros de la cubierta, que incorpora células fotovoltaicas, proporcionan sombra y contribuyen, como todo el diseño del edificio, a regular la temperatura interior y, al mismo tiempo, a reducir la demanda de energía.

Enterrando una parte de la estructura en el terreno no solo contribuye al diseño sostenible del edificio, sino que además reduce el impacto visual en la zona. No obstante, la bodega recibe su debida visibilidad ya que está situada cerca de la carretera nacional I.

Desde el corazón de la bodega se extiende una galería elevada para el público sobre entresuelos acristalados que se interna en cada ala permitiendo a los visitantes una vista de todos los procesos desde un punto elevado. El concepto de “bodega transparente” es uno de los aspectos más novedosos en el que se basa el diseño del edificio, ya que permite visitar y visualizar fácilmente todas las etapas de producción del vino.

El interior de la bodega cuenta con grandes cristaleras que permiten un mejor acercamiento a la cultura del vino. Entre las alas se encuentran un hall luminoso y las oficinas, con terrazas, estanques y vistas sobre los viñedos. Con paredes revestidas de listones de antiguas barricas, el diseño de las zonas públicas evoca la rica tradición vitivinícola de la zona.

Distribución interior

Planta baja: Esta planta está parcialmente enterrada, y cada ala alberga una fase en el proceso de producción del vino. En el ala más cercana a la carretera se encuentran las instalaciones para el proceso de fermentación: 46 cubas de acero con una capacidad de 30 000 litros, 10 cubas para la microvinificación (11 800 litros), 6 para refrigeración (30 000 litros) y finalmente 10 cubas para el almacenamiento de un total de 53 000 litros. Todos los depósitos son de acero inoxidable y cuentan con un sistema de control de temperatura incorporado. La segunda ala alberga el almacén de barriles con un total de 6000 barricas de roble francés y americano. La tercera ala aloja el botellero con una capacidad para 750 000 botellas.

Primera planta: El acceso y las oficinas están situados en la primera planta. Además, la bodega dispone de salas de cata, una sala de reunión, auditorio, tienda, cafetería, y restaurante. La escalera central permite el acceso a todas las zonas de la producción de vino desde la planta baja.

Cubierta: Accesible a los vehículos a través de una rampa, desde la cubierta se puede verter directamente la uva recogida en el edificio sin que sean necesarias instalaciones de transporte adicionales.